Todos los años los alumnos de infantil y primer ciclo de primaria van a la Granja escuela del Palomar, en Chapinería, y allí pasan dos noches y tres días.
Los de segundo ciclo van a la granja escuela Jarama.
En ambos sitios los monitores son encantadores.
Estar en contacto con la naturaleza, en el campo, realizando talleres y cuidando de animales que nunca hemos visto es algo necesario para estas generaciones. Una experiencia inolvidable.